La vida útil de tu bicicleta dependerá del cuidado que reciba durante su funcionamiento.
Los chequeos preventivos permiten identificar el nivel de desgaste de un componente, el óptimo funcionamiento de las piezas y sobre todo prolongar la durabilidad de nuestra compañera de viajes y aventuras.
Es muy importante tomar en cuenta las recomendaciones del asesor de ventas, el manual de usuario e incluso esta guía de 5 mandamientos para el cuidado de tu bicicleta.
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No guardar en estado de suciedad:
Al concluir una ruta y habiendo atravesado tu bicicleta por diferentes condiciones de humedad y polvo recuerda limpiar el cuadro así como también la transmisión para evitar que se fije la suciedad en los componentes.
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No usar con componentes desgastados o dañados:
Recomendaciones: asegúrate de adquirir repuestos originales y garantizados.
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No manipular sin conocimiento ni herramientas necesarias:
A veces un fallo menor en tu bicicleta se puede agravar si no utilizas las herramientas y el conocimiento adecuado, el error puede salir mucho más costoso de lo previsto.
Recomendaciones: acude a un especialista técnico o consulta una guía que te permita reparar el componente afectado. Si deseas calidad y mejora tu técnico seguramente tendrá la solución.
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No voltear la bicicleta:
Recomendaciones: apoya tu bicicleta a una pared o estructura firme, puedes usar la rueda posterior como contención para que no se ruede o también usar un soporte de bicicleta de pared o de piso, es más seguro.
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No inflar - desinflar las llantas demasiadas veces:
Recomendación: aplica un 70 - 90% de la presión recomendada en tus llantas, utiliza un inflador con medidor de presión. Cuando vayas por terrenos rocosos la presión debe ser inferior , de lo contrario tendrás mayor rebote en el terreno.
Un chequeo preventivo, una o dos veces por mes aumentarán la vida útil de los componentes de tu bicicleta, recuerda que una revisión temprana te permitirá actuar con tiempo y el costo no será tan elevado. Un ciclista prevenido vale por dos.